martes, 4 de mayo de 2010

Los olvidados del temario...

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"El entierro en Ornans es, en realidad, el entierro del Romanticismo" (Gustave Courbet)

Una nueva entrega de nuestra categoría "Los olvidados del temario".

En Extremadura el temario incide en el siglo XIX en el Neoclasicismo y en el Romanticismo pictórico para luego plantear el primer gran estilo moderno, como es el Impresionismo.

Hablamos de que el Romanticismo se extingue hacia 1840-1850 mientras que las primeras manifestaciones del Impresionismo están alrededor de 1870.

¿ No hay más que Academicismo entre ambos momentos?

Por supuesto que no. Hay un conjunto de corrientes y movimientos que han sido sacrificados por las premuras del temario. Hablamos de la Escuela de Barbizon, el Realismo, los prerrafaelitas o la escuela norteamericana Hudson River School.


La Escuela de Barbizon de pintura (aprox. 1830–1870) fue el conjunto de pintores reunidos en torno al pueblo de Barbizon, cercano al bosque de Fontainebleau, donde los artistas de este círculo desarrollaron un nuevo modo de entender la pintura. Los integrantes fundadores de la escuela de Barbizon fueron Théodore Rousseau, Jean-Baptiste Camille Corot, Jean-François Millet y Charles-François Daubigny.

Muchos de ellos han sido posteriormente adscritos al realismo pictórico pero sus primeras experiencias artísticas fueron dentro de este grupo, comprometido con el arte y rechazando el estilo y las formas de hacer arte de neoclásicos y románticos.

Impresionados por una exposición retrospectiva de Constable en París, su temática se vinculó al mundo rural, buscando inspiración directa en la naturaleza. Siempre hemos hablado del "plein air" de los impresionistas pero estos autores fueron los primeros en plantear sus cuadros a la vista directa de los paisajes . Así, las escenas naturales fueron la temática más recurrente, como elemento protagonista de su pintura y no como mero telón de fondo de hechos dramáticos o escenas mitológicas. No hay en esta escuela presupuestos de critica social o denuncia como algunos de sus miembros realizarán años después, una vez que la habían abandonado.


Rousseau es el ejemplo más claro de la evolución en el gusto de la sociedad francesa pues desde un inicial desprecio a su obra frente al gusto romántico dominante, hacia 1853 su producción se reune en una exposición y es definitivamente alabado como uno de los grandes pintores del siglo.

El realismo pictórico es un movimiento que surge al amparo de una renovación literaria, cultural y del pensamiento en Europa a mediados del siglo XIX. Los procesos revolucionarios para la afirmación del liberalismo, el movimiento e ideologías obreras aun en formación pero cada vez más activas y concienciadas y las duras condiciones socioeconómicas creadas por la industrialización llevaron a los autores y artistas a expresiones de denuncia social en todos los campos del arte.

Los pintores de este movimiento comparten una estética basada en la representación directa de la realidad. La manera cómo se materializa este principio básico varia desde la crudeza objetiva de Courbet hasta la simplificación gráfica de Daumier, pasando por el filtro idealista de Millet.

En cualquier caso, todos comparten la radicalidad de los temas: ante la trascendencia que conceden al tema romanticismo y academicismo, el arte realista entiende que no hay temas banales y que, en consecuencia, cualquier cuestión puede ser objeto de interés pictórico. Esta banalización será clave en el desarrollo de los futuros planteamientos impresionistas. Sin embargo, el tema supera lo descriptivo para centrarse en la critica social. El artista como intelectual "movilizado", consciente de la miseria, denuncia la existencia miserable para que, a través del arte, llegue a todas las personas con sensibilidad.



Pero, más allá de la critica social, los realistas muestran muchos avances pictóricos que luego van a ser copiados y superados por Monet o Renoir. Frente a la fuerte presencia del dibujo en muchas de sus obras y una pincelada aun bastante larga y contínua, otras obras rompen con esta forma de pintar y muestran una total dependencia del color para crear formas, un manifiesto abcoetamiento de las figuras y una pincelada ondulante, matérica y, a veces, corta y nerviosa.




La fuerza expresiva de Courbet, su agudo realismo en los temas y capacidad pictórica para crear en diferentes estilos y con diferentes técnicas le llevó a tener el reconocimiento de la crítica que no del público. Ya hacia 1870 cuando otros estilos se consolidaban, Courbet fue considerado uno de los grandes del arte francés.

La Hudson River School fue un movimiento artístico creado en EE.UU fuertemente influido por el romanticismo y por la escuela de Barbizon.
Sus pinturas tenían como tema el valle del río Hudson y sus alrededores. Su idea es mostrar una visión pastoral, idílica, del paisaje donde el ser humano y la naturaleza coexisten pacíficamente, muy en la línea de lo pintoresco en el romanticismo. Pero esta idealización se ve modificada por su interés por reflejar de forma muy realista el entorno, aun semisalvaje, con una agricultura que convive con la más pura naturaleza.
Thomas Cole es reconocido de forma unánime como creador del movimiento. Este estilo permitió que se introdujeran en el mercado americano multiples reproducciones y obras de fondo realista y, posteriormente, impresionista que pusieron en relación el arte europeo con el del nuevo continente.



La Hermandad Prerrafaelita o Prerrafaelista
(Pre-Raphaelite Brotherhood) fue una asociación de pintores, poetas y críticos ingleses, fundada en 1848 en Londres por John Everett Millais, Dante Gabriel Rossetti y William Holman Hunt. La Hermandad duró como grupo constituido apenas un lustro, pero su influencia se dejó sentir en la pintura inglesa hasta entrado el siglo XX.

Los prerrafaelistas rechazaban el arte académico predominante en la Inglaterra del siglo XIX, centrando sus críticas en Sir Joshua Reynolds, fundador de la Royal Academy of Arts. Desde su punto de vista, la pintura académica imperante no hacía sino perpetuar el manierismo de la pintura italiana posterior a Rafael y Miguel Ángel, con composiciones elegantes pero vacuas y carentes de sinceridad. Por esa razón, ellos propugnaban el regreso al detallismo minucioso y al luminoso colorido de los primitivos italianos y flamencos, anteriores a Rafael (de ahí el nombre del grupo), a los que consideraban más auténticos.

La realidad es que este estilo se acercaba a un profundo realismo pictórico, con una gran fuerza del dibujo y los colores planos, acentuado todo ello por un detallismo al estilo de la pintura flamenca tardomedieval y con unas temáticas que ahondan en leyendas medievales, paisajes fanásticos y mundos irreales.

Su huella ha sido enorme puesto que en pocos años el modernismo artístico acepta las formas de este estilo como principios de su estilo decorativo. Su carácter mágico e hiperrealista ha sido siempre del gusto popular.

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2 comentarios:

PACO HIDALGO dijo...

Eso esta bien, Javier, recoger lo que no entra en el temario. Yo hay cosas que, aún sabiendo que no queda recogido en el temario, lo doy y lo exijo en los exámenes. En Andalucía sí damos el realismo (bueno, sólo Courbet). Saludos.

Javier Ridruejo dijo...

Yo me resisto Paco a la esclavitud del temario...así me va, claro...
Un saludo

How do you say in English...?

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